El accidente enterró el pequeño poblado histórico de Bento Rodrígues, un sub-distrito de Mariana, bajo el lodo. Al menos 11 personas han fallecido y 600 más fueron desplazadas.
Además, el suministro de agua para más de 250,000 personas en el área fue interrumpido debido a sus concentraciones de metales pesados.
Toneladas de lodo formado de residuos de hierro mineral y silicio, cuyo volumen se estima en 25,000 albercas olímpicas, se han esparcido por más de 800 kilómetros y han alcanzado uno de los ríos más grandes de Brasil, el Río Doce.
El lodo contaminado, en el que el Instituto de Manejo de Agua Minas Gerais, ha encontrado sustancias como mercurio, arsénico, cromo y manganeso a niveles que exceden los limites de consumo humano, el cual ha llegado a la costa del estado Espírito Santo.
Y podría tener un impacto potencial en el ecosistema marino mayor. Los riesgos van más allá de los elementos químicos en particular que se encuentran en el lodo. Por ejemplo, el proceso de descomposición comenzó en la presa y puede causar distintas contaminaciones bacteriológicas y químicas.
Muchos han culpado a Samarco por el desastre, que es la minera brasileña a cargo de las presas. Aloysio da Silva Ferrão Filho, investigador de la Fundación Oswaldo Cruz, ha afirmado que la biodiversidad en el río se ha perdido por completo y que varias especies, incluyendo algunas endémicas podrían haberse extinguido. Aunque se espera cierta recuperación por medio de la repoblación de otros afluentes, es imposible estimar cuanto tardará, afirmo el Ferrão.
De acuerdo a Ferrão los efectos podrían durar por décadas ya que las altas concentraciones de metales pesados en las muestras de agua del Río Doce, podrían derivar en la bioacumulación de metales en la cadena alimenticia.
Se realizarán varias investigaciones para determinar las causas del desastre, incluyendo una por parte de fiscales federales y estatales y otras del Instituto Brasileño de Medio Ambiente y un grupo independiente de investigadores. A pesar de que Samarco ha declarado que varios movimientos sísmico que ocurrieron en el área pudieron haber causado daño a la presa, algunos expertos han señalado negligencia por parte de la compañía y el los cuerpo del gobierno responsables de supervisar la mina.
El pasado 13 de noviembre, $75 millones de dólares fueron congelados de la cuenta de Samarco y serán utilizados para brindar reparaciones a las víctimas locales del accidentes. Un día antes, la Presidenta de Brasil Dilma Rousseff confirmó una multa de $62.5 millones de dólares para la minera, anunciando que además se impondrán otras multas.
“Debido a que un incidente medioambiental de éstas magnitudes no tiene precedentes, es imposible calcular el impacto real por ahora,” asegura Klemens Laschefski, investigador de la Universidad Federal de Minas Gerais.
Además ha advertido que los cambios en el caudal del río con respecto a las corrientes y las nuevas condiciones geoquímicas de los sedimentos traerán cambios prfundos al ecosistema.
Fuente: muyinteresante.com.mx, imagen de wikipedia
